Fibra de maíz soluble

Nombre de la fibra

  • fibra de maíz soluble, maltodextrina, maltodextrina resistente

Fuente

Maíz

Antecedentes

La fibra de maíz soluble está disponible en el mercado de EE. UU. desde 2007, y se emplea en alimentos y bebidas de toda América, Europa y el sureste asiático. La fibra de maíz soluble proviene del maíz, y se produce mediante hidrólisis enzimática del almidón de maíz. Es de baja viscosidad, soluble en agua y muy estable frente al calor, el pH y las tensiones de procesamiento. La fibra de maíz soluble satisface la demanda de un ingrediente bajo en azúcares y con mayor contenido de fibra, y puede emplearse para elaborar alimentos de consumo envasados con bajo contenido en azúcares que, a la vez, son fuente de fibra alimentaria.

Propiedades nutricionales

Estudios en animales, in vitro y en seres humanos han demostrado que la fibra de maíz soluble resiste la digestión en el intestino delgado y fermenta en el intestino grueso. La fibra de maíz soluble contiene una mezcla de enlaces glucosídicos α 1-6, α 1-4, α 1-2 y α 1-3, que contribuye a su baja digestibilidad. Los cambios en los ácidos fecales grasos de cadena corta (AGCC), la disminución en el pH del intestino y el aumento de hidrógeno espirado indican que fermenta en el intestino.

Un incremento repentino de la fibra en la dieta puede causar leves alteraciones gastrointestinales, aunque estas son transitorias y mejoran con la adaptación a la fuente de fibra. La fibra de maíz soluble se tolera bien en diferentes dosis. Los ensayos clínicos realizados para evaluar la tolerancia gastrointestinal a la fibra de maíz soluble mostraron una buena tolerancia de la misma en dosis de 12 a 27 g/día durante un período de entre 10 días y 3 semanas1 2 3 4. En un estudio realizado con 20 voluntarios sanos, la fibra de maíz soluble obtuvo buena tolerancia, tanto en una dosis única de 40 g como en dosis múltiples con un total de 65 g a lo largo de un día5.

Beneficios fisiológicos

  1. Incrementa la absorción de calcio y puede ayudar a la mineralización de los huesos
  2. Propicia una buena salud digestiva gracias a sus efectos laxantes
  3. Se han demostrado efectos fisiológicos adicionales en pruebas con animales, pruebas in vitro y/o ensayos clínicos, como:
    • Efectos prebióticos: Propicia el crecimiento de bacterias beneficiosas y, a la vez, limita el crecimiento de bacterias indeseadas.
    • Provoca una baja respuesta glucémica y, si se emplea como sustituto de los azúcares, ayuda a la disminución de insulina y glucosa en sangre en la sobremesa.
    • Control de peso a largo plazo: La fibra de maíz soluble, al emplearse para sustituir ingredientes de mayor valor calórico, puede ayudar a reducir la ingesta de calorías.

Verificación científica de los beneficios

  • Mayor absorción de calcio: En un estudio cruzado aleatorio llevado a cabo con 24 adolescentes durante un período de tres semanas, con método de doble ciego controlado por placebo, la absorción de calcio de aquellos que consumían 12 g/día de fibra de maíz soluble se incrementó en un 12 % en comparación con el grupo de control. Su dieta incluyó, además, 600 mg/día de calcio6. Los investigadores descubrieron también que el cambio en la absorción de calcio se correlacionó de forma positiva con un aumento significativo de las bacterias intestinales, especialmente los bacteroides filo6. La investigación determinó que si los adolescentes del estudio hubieran seguido consumiendo fibra de maíz soluble, aumentando así su absorción de calcio, habrían conseguido un aumento del calcio retenido de 41 mg/día adicionales. Una ingesta continuada a lo largo de un año produciría unos 15 g de calcio adicionales, lo que supone aproximadamente un 1,8 % del total de calcio del cuerpo. Se obtuvieron resultados similares en cuanto al aumento de absorción de calcio en un estudio cruzado aleatorio realizado a lo largo de cuatro semanas, con método de doble ciego controlado por placebo, en el que participaron 26 mujeres adolescentes independientes que consumían 10 y 20 g/día de fibra proveniente de fibra de maíz soluble, y cuya dieta incluía ≤ 800 mg/día de calcio6.  Aunque los resultados de estos estudios en humanos solo evaluaron la metabolización del calcio, un estudio de 12 semanas llevado a cabo en ratas evaluó el impacto de la fibra de maíz soluble en los índices óseos y en la metabolización del calcio7. Comparado con un grupo de control de celulosa, la fibra de maíz soluble mejoró el contenido mineral óseo (CMO), densidad mineral ósea (DMO), CMO y DMO trabecular, CMO cortical y área y grosor cortical del fémur distal.  La fortaleza ósea del fémur distal mejoró también significativamente con la ingesta de fibra de maíz soluble13.  Además, un reciente estudio de Jakeman et al. midió, mediante metodología 41Ca, la respuesta de recambio óseo a dosis de ingesta crónica de fibra de maíz soluble a lo largo de un período de 50 días en mujeres sanas postmenopáusicas.  Los resultados mostraron aumentos significativos en la retención de calcio en los huesos, en correlación con la dosis de consumo de fibra de maíz soluble.  Las concentraciones de fosfatasa alcalina en suero óseo incrementaron también significativamente en la dosis de 20 gramos en comparación con el control (p=0,03).  (Jakeman et al., no publicado)
  • Evacuación: Treinta y seis adultos sanos que consumieron 20 g/día de fibra de maíz soluble en cereales de desayuno y magdalenas experimentaron un incremento en el peso de sus heces, según indican los resultados de un estudio cruzado aleatorio de 10 días llevado a cabo con método de doble ciego y grupo de control con placebo3. El mayor peso fecal se observó también en otro estudio cruzado aleatorio, con método de doble ciego y grupo de control con placebo, llevado a cabo en 21 hombres sanos con sobrepeso que ingirieron 21 g/día de fibra de maíz soluble durante 21 días4.
  • Efectos prebióticos: Tras el consumo de 21 g/día de fibra de maíz soluble durante 21 días, se registró un incremento de 1 bifidobacterium en 21 hombres sanos comparados con un grupo de control que no ingería fibra4. Otro estudio, realizado con 24 adolescentes, descubrió un incremento de las bacterias beneficiosas –bacteroides, butyricicoccus, oscillibacter y dialister– en correlación con un incremento en la absorción de calcio al consumir 12 g/día de fibra de maíz soluble durante tres semanas8. El aumento significativo de bacterias beneficiosas observado en los estudios con seres humanos ha sido corroborado por estudios in vitro realizados con inoculaciones de heces humanas en condiciones que simulan el tracto gastrointestinal humano9 10.
  • Respuesta favorable a insulina y glucosa en sangre: Se han evaluado los efectos glucémicos de la fibra de maíz soluble en dos ensayos clínicos11 12 y un estudio realizado en animales13. En un estudio cruzado aleatorio controlado en el que participaron 12 adultos se comparó la respuesta glucémica de la fibra de maíz soluble a la de la glucosa tras la ingesta de alimentos9.  El incremento de respuesta de la insulina y la glucosa a la fibra de maíz soluble fue significativamente inferior al del control de glucosa.  En otro estudio cruzado aleatorio de corta duración y método de ciego único10 realizado en 18 adultos con sobrepeso, que habían ingerido una dosis de 55 g de fibra de maíz soluble, se observó un efecto significativamente inferior en la glucosa en sangre e insulina después de la ingesta de comida en comparación con el grupo de control, que había ingerido el total de calorías.  Por último, en una serie de formulaciones de fibra de maíz soluble investigadas en un estudio animal se descubrió que el nivel de respuesta de glucosa en sangre e insulina después de la ingesta era significativamente menor que el del grupo de control con maltodextrina11.

 ¿En qué tipos de alimentos suele encontrarse esta fibra?

La fibra de maíz soluble se emplea en una gran variedad de alimentos preparados, bebidas y condimentos, como cereales, alimentos horneados, repostería, productos lácteos, alimentos congelados, sopas, aliños para ensaladas, bebidas de fruta, refrescos carbonatados, bebidas sustitutivas de comida y agua con sabores.

 

Ingesta Diaria Recomendada

“De aquellos nutrientes insuficientemente consumidos el calcio, el potasio, la fibra alimentaria y la vitamina D se consideran nutrientes de interés para la salud pública, ya que las bajas ingestas están asociadas a problemas de salud”.Dietary Guidelines for American 2015-2020 (Directrices alimentarias para los americanos 2015-2020) (8ª edición).

En 2002, el Instituto de Medicina (conocido ahora como Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina) recomendó un consumo diario de fibra de 38 gramos para hombres de hasta 50 años y 25 gramos para mujeres de hasta 50 años. La ingesta diaria recomendada para hombres y mujeres de más de 50 años es de 30 y 21 gramos por día respectivamente, debido a la reducción del consumo de comida a partir de estas edades. Esta recomendación de ingesta diaria de fibra es de, aproximadamente, 14 g/1000 kcal. La mayoría de los americanos consume solo la mitad de la cantidad diaria recomendada (13,5 g y 18 g respectivamente). En muchos países tampoco se consume la suficiente fibra, tal como muestra este mapa interactivo con datos de 2010 obtenidos de Global Dietary Database. Esta escasez de nuestra dieta se conoce como déficit de fibra. El déficit de fibra es menor en algunos países, como México. Un informe de 2012 estima que la ingesta de fibra en México es de 27 gramos por día para los hombres y 22 gramos por día para las mujeres.

Según los hábitos alimenticios actuales, eliminar este déficit de fibra sin consumir alimentos enriquecidos en fibra aumentaría de forma significativa el consumo de calorías. Para alcanzar la ingesta de fibra recomendada sin tomar alimentos enriquecidos en fibra, la mayoría de las personas necesitaría aumentar su consumo en más de 500 calorías diarias. Pero, gracias a los alimentos enriquecidos en fibra, no es necesario sumar calorías a la dieta para alcanzar las necesidades nutricionales de fibra. Los estudios muestran que, por ejemplo, los cereales enriquecidos con fibra (2,5 g – 5 g) proporcionarían una ingesta de fibra de 24,7 g – 39,1 g/día sin incremento calórico. (Nicklas et al., 2011; Jones, 2014)

Los alimentos enriquecidos en fibra ayudan a reducir el déficit de fibra y, a la vez, proporcionan un excelente sabor y beneficios adicionales para el metabolismo. Una dieta debería, generalmente, contener una mezcla de varios tipos de fibra.

Consumo de distintas fibras

Aunque la mayoría de tipos de fibra tienen más de un efecto beneficioso para la salud, ninguna de ellas cuenta con todos estos potenciales beneficios. Existen efectos comunes a una gran variedad de fibras diferentes, y otros que solo se asocian a determinadas fibras. Por ello, es importante consumir distintos tipos de fibra con el fin de maximizar los beneficios para la salud.

La fibra puede encontrarse en multitud de alimentos diferentes. La cantidad de fibra por ración puede encontrarse fácilmente consultando el Panel de Información Nutricional de dicha fibra alimentaria.

NutritionLabel (1)

Además, puede consultar el contenido en fibra de ciertos alimentos que no incluyen etiqueta nutricional, como las frutas y verduras, aquí.

Tolerancia gastrointestinal

Un aumento súbito de la ingesta de fibra, sobre todo en personas que llevan una dieta baja en fibra, puede tener efectos gastrointestinales, por ejemplo, incremento de las evacuaciones semanales, heces más blandas (sin llegar a la diarrea) o más flatulencias. Estos efectos naturales se deben o bien al efecto de volumen, o bien a la fermentación de la fibra en el tracto gastrointestinal. Los efectos potenciales pueden minimizarse aumentando la ingesta de fibra de forma gradual. Así, el tracto gastrointestinal podrá adaptarse mejor. Por este motivo puede resultar útil disminuir el consumo de fibra hasta que los síntomas remitan y, después, incrementar gradualmente la ingesta hasta llegar a la cantidad recomendada de 14 g/1000 kcal.

 

Referencias

1 Sanders L, Kendall C, Maki K, et al. A novel maize-based dietary fiber is well tolerated in humans. FASEB J. 2008; 22:lb761.

2 Stewart ML, Nikhanj SD, Timm DA, et al. Evaluation of the effects of four fibers on laxation, gastrointestinal tolerance and serum markers in health humans. Ann Nutr Metabol. 2010; 56:91-98.

3 Timm DA, Thomas W, Boileau TW, et al. Polydextrose and Soluble Corn Fiber increase five-day fecal wet weight in healthy men and women. J Nutr. 2013;143:473-478.

4 Vester Boler BM, Serao MC, Bauer LL, et al. Digestive physiological outcomes related to polydextrose and soluble maize fiber consumption by healthy adult men. Br J Nutr. 2011; 106:1864-71.

5 Housez B, Cazaubiel M, Vergara C, et al. Evaluation of digestive tolerance of a soluble corn fiber. J Hum Nutr Diet. J Hum Nutr Diet. 2012 Oct;25(5):488-96..

6 Macdonald-Clarke C, Martin B, Whisner C, et al. 2013. Soluble Corn Fiber Increases Calcium Absorption in Free Living Adolescent Girls. J Bone Miner Res 28 (Suppl 1).

7 Weaver CM, Martin BR, Story JA, et al. Novel fibers increase bone calcium content and strength beyond efficiency of large intestine fermentation. J Agri Food Chem. 2010; 58:8952-8957.

8 Whisner CM, Martin BR, Nakatsu CH, McCabe GP, McCabe LD, Peacock M, Weaver CM. Soluble maize fiber affects short-term calcium absorption in adolescent boys and girls: a randomised controlled trial using dual stable isotopic tracers. Br J Nutr. 2014; 112:446-456.

9 Maathuis A, Hoffman A, Evans A, et al. The effect of undigested fraction of maize products on the activity and composition of the microbiota determined in a dynamic in vitro model of the human proximal large intestine. J Am Coll Nutr. 2009; 28:657-66.

10 Titoria P, Gibson P, Komitopoulou E, et al. Understanding Prebiotics. Confidential Collaborative Project In House Final Report No. 120368. Leatherhead Food International. March 2007.

11 Kendall C, Esfahani A, Hoffman A, et al. Effect of novel maize-based dietary fibers on postprandial glycemia and insulinemia. J Am Coll Nutr. 2008; 27:711-8.

12 Konings E, Schoffelen PF, Stegen J, et al. Effect of polydextrose and soluble maize fiber on energy metabolism, metabolic profile and appetite control in overweight men and women. Br J Nutr. 2014 Jan 14;111(1):111-21.

13 Knapp B. Select Novel Carbohydrates Affect Glycemic and Insulinemic Response, Energy Value, and Indices of Gut Health as Measured Using Canine, Avian, Rodent, and in vitro Model Systems.  Dissertation. Submitted in partial fulfillment of the requirements for the degree of Doctor of Philosophy in Animal Sciences. University of Illinois, Urbana-Champaign, 2010.


Polidextrosa

Fuente

Maíz

Antecedentes

La polidextrosa se compone de varios carbohidratos de dextrosa (glucosa) que se unen aleatoriamente formando un polímero. La polidextrosa se elabora a partir de componentes producidos naturalmente.  En el polímero predomina el enlace glucosídico 1,6, pero también se encuentran presentes enlaces α- y β-1,2; 1,3 y 1,4.  La polidextrosa es un ingrediente alimentario multifuncional que se emplea como sustituto del azúcar, grasas y calorías, y aumenta el contenido en fibra de los alimentos. También se usa como estabilizante y espesante, y ayuda a mantener el grado óptimo de humedad en un alimento.  La polidextrosa se emplea como ingrediente alimentario desde los años 60.

Propiedades nutricionales

Debido a la compleja distribución de enlaces en su estructura altamente ramificada, la polidextrosa resiste la digestión en el tracto gastrointestinal superior y se fermenta parcialmente en el colon. Ya que la polidextrosa no se digiere y solo fermenta parcialmente en el intestino, su valor energético es de solo 1 kcal/gramo.

El tracto intestinal tolera bien la polidextrosa, posiblemente porque no se produce gran cantidad de gas durante la fermentación.  La Comisión conjunta de expertos en aditivos alimentarios de la FAO/OMS y el Comité científico alimentario de la Comisión Europea concluyeron que es posible consumir una dosis de polidextrosa de hasta 90 g/día o 50 g en una dosis única sin sufrir efectos gastrointestinales perjudiciales1.

Beneficios fisiológicos

  1. Evacuación.
  2. Respuesta favorable a glucosa en sangre: ayuda a reducir los niveles de glucosa en sangre gracias al enriquecimiento de la fibra, efectos prebióticos y beneficios saciantes.
  3. Control de peso a largo plazo: La polidextrosa, al emplearse para sustituir ingredientes de mayor valor calórico, puede ayudar a reducir la ingesta de calorías.

Verificación científica de los beneficios

Evacuación: El consumo de polidextrosa incrementa el peso/densidad fecal2 3 4 5 6 7, la consistencia fecal8 2 6, la facilidad de defecación4 y la frecuencia fecal,2 4 y reduce el tiempo de tránsito9 en adultos sanos. Los efectos en la densidad fecal se producen en un plazo de entre 8 y 30 días3. La dosis mínima más eficaz para la mejora de la densidad fecal4 y la consistencia fecal8 es de 8 g/día, mientras que la facilidad y frecuencia de defecación mejoran con una dosis de solo 4 g/día4.

Respuesta favorable a glucosa en sangre: El índice glucémico de la polidextrosa es de 7, en comparación con la glucosa, cuyo índice glucémico es de 10010.  Según un panel de la EFSA, se ha establecido una relación de causa-efecto entre el consumo de alimentos o bebidas que contienen polidextrosa y la reducción de la respuesta de glucosa en sangre tras las comidas, en comparación con aquellos alimentos o bebidas que contienen azúcar11.  La reducción de la respuesta de glucosa en sangre e insulina después de las comidas también se ha observado en individuos con diabetes de tipo 212.

Efectos prebióticos: En términos generales, se cree que un prebiótico debería incrementar de forma selectiva el crecimiento de bacterias intestinales beneficiosas, como la bacteria del ácido láctico y/o las bifidobacterias. La ingesta de polidextrosa se asocia a una mayor actividad prebiótica.

Saciedad: La polidextrosa puede ayudar a las estrategias de control de peso, ya que sustituye a componentes de mayor valor calórico (como grasas o azúcares) en las formulaciones. Esto permite desarrollar alimentos más bajos en calorías. Su contribución calórica es de solo 1 kcal/g. Aunque no se han llevado a cabo estudios suficientes, los hallazgos sugieren que la polidextrosa también puede incrementar la sensación de saciedad y reducir la ingesta de energía en la siguiente comida.

¿En qué tipos de alimentos suele encontrarse esta fibra?

La polidextrosa es una fuente de fibra alimentaria que puede ser añadida a multitud de alimentos, como cereales con azúcares reducidos, cereales sin azúcar añadido y cereales sin azúcar, aperitivos, productos de panadería, bebidas, productos lácteos y salsas.  También puede encontrarse en productos tradicionales de panadería, bebidas, lácteos y salsas.

 

Ingesta Diaria Recomendada

“De aquellos nutrientes insuficientemente consumidos el calcio, el potasio, la fibra alimentaria y la vitamina D se consideran nutrientes de interés para la salud pública, ya que las bajas ingestas están asociadas a problemas de salud”.Dietary Guidelines for American 2015-2020 (Directrices alimentarias para los americanos 2015-2020) (8ª edición).

En 2002, el Instituto de Medicina (conocido ahora como Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina) recomendó un consumo diario de fibra de 38 gramos para hombres de hasta 50 años y 25 gramos para mujeres de hasta 50 años. La ingesta diaria recomendada para hombres y mujeres de más de 50 años es de 30 y 21 gramos por día respectivamente, debido a la reducción del consumo de comida a partir de estas edades. Esta recomendación de ingesta diaria de fibra es de, aproximadamente, 14 g/1000 kcal. La mayoría de los americanos consume solo la mitad de la cantidad diaria recomendada (13,5 g y 18 g respectivamente). En muchos países tampoco se consume la suficiente fibra, tal como muestra este mapa interactivo con datos de 2010 obtenidos de Global Dietary Database. Esta escasez de nuestra dieta se conoce como déficit de fibra. El déficit de fibra es menor en algunos países, como México. Un informe de 2012 estima que la ingesta de fibra en México es de 27 gramos por día para los hombres y 22 gramos por día para las mujeres.

Según los hábitos alimenticios actuales, eliminar este déficit de fibra sin consumir alimentos enriquecidos en fibra aumentaría de forma significativa el consumo de calorías. Para alcanzar la ingesta de fibra recomendada sin tomar alimentos enriquecidos en fibra, la mayoría de las personas necesitaría aumentar su consumo en más de 500 calorías diarias. Pero, gracias a los alimentos enriquecidos en fibra, no es necesario sumar calorías a la dieta para alcanzar las necesidades nutricionales de fibra. Los estudios muestran que, por ejemplo, los cereales enriquecidos con fibra (2,5 g – 5 g) proporcionarían una ingesta de fibra de 24,7 g – 39,1 g/día sin incremento calórico. (Nicklas et al., 2011; Jones, 2014)

Los alimentos enriquecidos en fibra ayudan a reducir el déficit de fibra y, a la vez, proporcionan un excelente sabor y beneficios adicionales para el metabolismo. Una dieta debería, generalmente, contener una mezcla de varios tipos de fibra.

Consumo de distintas fibras

Aunque la mayoría de tipos de fibra tienen más de un efecto beneficioso para la salud, ninguna de ellas cuenta con todos estos potenciales beneficios. Existen efectos comunes a una gran variedad de fibras diferentes, y otros que solo se asocian a determinadas fibras. Por ello, es importante consumir distintos tipos de fibra con el fin de maximizar los beneficios para la salud.

La fibra puede encontrarse en multitud de alimentos diferentes. La cantidad de fibra por ración puede encontrarse fácilmente consultando el Panel de Información Nutricional de dicha fibra alimentaria.

NutritionLabel (1)

Además, puede consultar el contenido en fibra de ciertos alimentos que no incluyen etiqueta nutricional, como las frutas y verduras, aquí.

Tolerancia gastrointestinal

Un aumento súbito de la ingesta de fibra, sobre todo en personas que llevan una dieta baja en fibra, puede tener efectos gastrointestinales, por ejemplo, incremento de las evacuaciones semanales, heces más blandas (sin llegar a la diarrea) o más flatulencias. Estos efectos naturales se deben o bien al efecto de volumen, o bien a la fermentación de la fibra en el tracto gastrointestinal. Los efectos potenciales pueden minimizarse aumentando la ingesta de fibra de forma gradual. Así, el tracto gastrointestinal podrá adaptarse mejor. Por este motivo puede resultar útil disminuir el consumo de fibra hasta que los síntomas remitan y, después, incrementar gradualmente la ingesta hasta llegar a la cantidad recomendada de 14 g/1000 kcal.

 

Referencias

1 Flood MT, Auerbach MH, Craig SA. A review of the clinical toleration studies of polydextrose in food. Food Chem Toxicol. 2004;42:1531-42.

2 Timm D, Thomas W, Sanders L, et al. Polydextrose and soluble corn fiber significantly increase stool weight, but do not influence whole gut transit time in healthy adults. FASEB J. 2011; 25: 587.583.

3 Vester Boler BM, Serao MC, Bauer LL, et al. Digestive physiological outcomes related to polydextrose and soluble maize fibre consumption by healthy adult men. Br J Nutr. 2011;106:1864-71.

4 Jie Z, Bang-Yao L, Ming-Jie X, et al. Studies on the effects of polydextrose intake on physiologic functions in Chinese people. Am J Clin Nutr. 2000;72:1503-9.

5 Endo K, Kumemura M, Nakamura K, et al. Effect of high cholesterol diet and polydextrose supplementation on the microflora, bacterial enzyme activity, putrefactive products, volatile fatty acid (VFA) profile, weight and pH of the faeces in healthy volunteers. Bifidobacteria Microflora. 1991;10:53-64.

6 Saku K, Yoshinaga K, Okura Y, et al. Effects of polydextrose on serum lipids, lipoproteins, and apolipoproteins in healthy subjects. Clin Therapeutics. 1991;13/2:254-258.

7 Tomlin J, Read NW. A comparative study of the effects on colon function caused by feeding ispaghula husk and polydextrose. Aliment Pharmacol Ther. 1988;2:513-9.

8 Costabile A, Fava F, Röytiö H et al. Impact of polydextrose on the faecal microbiota: a double-blind, crossover, placebo-controlled feeding study in healthy human subjects. Br J Nutr. 2012;108:471-81.

9 Hengst C, Ptok S, Roessler A, et al. Effects of polydextrose supplementation on different faecal parameters in healthy volunteers. Int J Food Sci Nutr. 2009;60 Suppl 5:96-105.

10 Foster-Powell K, Holt SH, Brand-Miller JC. International table of glycemic index and glycemic load values: 2002. Am J Clin Nutr. 2002;76:5-56.

11 EFSA Panel on Dietetic Products, Nutrition and Allergies (NDA); Scientific Opinion on the substantiation of health claims related to the sugar replacers xylitol, sorbitol, mannitol, maltitol, lactitol, isomalt, erythritol, D-tagatose, isomaltulose, sucralose and polydextrose and maintenance of tooth mineralisation by decreasing tooth demineralisation (ID 463, 464, 563, 618, 647, 1182, 1591, 2907, 2921, 4300), and reduction of post-prandial glycaemic responses (ID 617, 619, 669, 1590, 1762, 2903, 2908, 2920) pursuant to Article 13(1) of Regulation (EC) No 1924/2006. EFSA J. 2011;9:2076. www.efsa.europa.eu/efsajournal

12 Wilson T, Luebke JL, Morcomb EF, et al. Glycemic responses to sweetened dried and raw cranberries in humans with type 2 diabetes. J Food Sci. 2010;75:H218-H223.

 


Fibra soluble de betaglucano de avena

Nombre de la/s fibra/s

  • Nombres y alias: betaglucano de avena, fibra de salvado de avena, fibra soluble de salvado de avena, fibra de avena, fibra soluble de avena
  • Entre los nombres químicos y sinónimos del betaglucano de avena están incluidos los siguientes:
    • β-D-glucano
    • (1-3),(1-4)- β-D-glucano

Fuente

Avena

Antecedentes

Los humanos llevan más de 2000 años cultivando y tomando avena.  Hoy en día existen numerosos productos alimentarios con avena, tanto en EE. UU. como en el resto del mundo.  Desde finales de los años 80, la fibra soluble de betaglucano de avena está reconocida como complemento dietético beneficioso.  Originalmente, la forma de consumo habitual era en copos de avena, avena arrollada y salvado de avena, pero ahora el betaglucano de avena se encuentra disponible como ingrediente adicional de una amplia variedad de productos alimentarios.  En 1997, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU. autorizó una mención de efecto terapéutico que afirmaba que la fibra soluble de betaglucano de avena reducía el riesgo de enfermedades cardíacas.  Se han autorizado menciones de efecto terapéutico similares en otros países, como Canadá, Australia y Brasil.  La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) también se ha posicionado a favor de dos menciones de efecto terapéutico: el betaglucano de avena reduce el colesterol y las respuestas glucémicas después de las comidas.

Propiedades nutricionales

Cuando tomamos avena o betaglucano, este reduce la absorción de colesterol en el tracto intestinal. El betaglucano reduce también la reabsorción de ácido biliar (que el cuerpo produce a partir del colesterol) y, por tanto, el cuerpo debe emplear más cantidad de colesterol circulante para producir ácido biliar. La menor absorción de colesterol en el intestino, unida a la mayor necesidad de colesterol circulante para la producción del ácido biliar, tiene como resultado una reducción del nivel de colesterol circulante en la sangre.

El betaglucano, que no es digerible por los seres humanos, sirve de valioso sustrato para la fermentación de bacterias en el colon. El betaglucano de avena es una fibra soluble generalmente bien tolerada.

Beneficios fisiológicos

  1. Reducción del colesterol en sangre: Una dosis diaria de al menos 3 gramos, consumida como parte de una dieta sana, puede reducir los niveles de colesterol LDL en sangre de forma significativa.
  2. Respuesta reducida de glucosa e insulina en sangre tras las comidas
  3. Control de peso a largo plazo: El betaglucano, al emplearse para sustituir ingredientes de mayor valor calórico, puede ayudar a reducir la ingesta de calorías y aumentar la sensación de saciedad

Verificación científica de los beneficios

  • Reducción del colesterol en sangre: El betaglucano de avena reduce el colesterol en sangre, y contribuye al mantenimiento de niveles de colesterol sanos en un rango normal. En términos generales, los datos sugieren que un consumo de betaglucano de 3 g/día como parte de una dieta sana puede reducir el colesterol LDL en un 3 % – 5 %.  Esto puede resultar en una reducción del riesgo de enfermedades cardíacas de un 3 % – 10 %. Las mayores reducciones se producen en aquellas personas cuyos niveles de colesterol iniciales son más altos.  Las menciones de efecto terapéutico autorizadas relativas a salud cardíaca / reducción del colesterol se basan en un consumo diario de 3 g de betaglucano. Esta cantidad reduce de forma significativa los niveles de colesterol LDL y colesterol total en sangre.  En la mayoría de los países en los que dichas menciones son válidas, la dosis diaria puede dividirse entre tres o cuatro raciones de comida.  La mención de efecto terapéutico de la FDA indica un mínimo de 0,75 g por ración para una ingesta diaria de 3 gramos.
  • Respuesta favorable a insulina y glucosa en sangre después de las comidas:
    • Los ensayos clínicos han demostrado que el betaglucano de avena y cebada disminuyen las respuestas glucémicas después de las comidas sin incrementar de manera desproporcionada las respuestas insulínicas después de las comidas. Una dosis de 4 g de betaglucano por cada 30-80 g de carbohidratos puede reducir de forma significativa la respuesta glucémica en la sobremesa.
    • Los betaglucanos mejoran la respuesta de insulina y glucosa en sangre reduciendo la interacción entre los alimentos y las enzimas digestivas del estómago, retrasando el vaciado gástrico y reduciendo la absorción de glucosa.
  • Beneficios para el control de peso: Aunque no se han llevado a cabo estudios suficientes, algunos hallazgos sugieren que la ingestión de fibra soluble de betaglucano también puede incrementar la sensación de saciedad y/o reducir la ingesta de energía en la siguiente comida.

¿En qué tipos de alimentos suele encontrarse esta fibra?

Avena integral, harina de avena integral, avena arrollada, copos de avena, salvado de avena

La fibra soluble de betaglucano de avena se añade también a bebidas (batidos de fruta, bebidas de yogur, zumos de fruta), yogures, barritas nutricionales, cereales, pasta, galletas cracker, productos horneados, sopas, salsas, aliños y suplementos dietéticos.

 

Ingesta Diaria Recomendada

“De aquellos nutrientes insuficientemente consumidos el calcio, el potasio, la fibra alimentaria y la vitamina D se consideran nutrientes de interés para la salud pública, ya que las bajas ingestas están asociadas a problemas de salud”.Dietary Guidelines for American 2015-2020 (Directrices alimentarias para los americanos 2015-2020) (8ª edición).

En 2002, el Instituto de Medicina (conocido ahora como Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina) recomendó un consumo diario de fibra de 38 gramos para hombres de hasta 50 años y 25 gramos para mujeres de hasta 50 años. La ingesta diaria recomendada para hombres y mujeres de más de 50 años es de 30 y 21 gramos por día respectivamente, debido a la reducción del consumo de comida a partir de estas edades. Esta recomendación de ingesta diaria de fibra es de, aproximadamente, 14 g/1000 kcal. La mayoría de los americanos consume solo la mitad de la cantidad diaria recomendada (13,5 g y 18 g respectivamente). En muchos países tampoco se consume la suficiente fibra, tal como muestra este mapa interactivo con datos de 2010 obtenidos de Global Dietary Database. Esta escasez de nuestra dieta se conoce como déficit de fibra. El déficit de fibra es menor en algunos países, como México. Un informe de 2012 estima que la ingesta de fibra en México es de 27 gramos por día para los hombres y 22 gramos por día para las mujeres.

Según los hábitos alimenticios actuales, eliminar este déficit de fibra sin consumir alimentos enriquecidos en fibra aumentaría de forma significativa el consumo de calorías. Para alcanzar la ingesta de fibra recomendada sin tomar alimentos enriquecidos en fibra, la mayoría de las personas necesitaría aumentar su consumo en más de 500 calorías diarias. Pero, gracias a los alimentos enriquecidos en fibra, no es necesario sumar calorías a la dieta para alcanzar las necesidades nutricionales de fibra. Los estudios muestran que, por ejemplo, los cereales enriquecidos con fibra (2,5 g – 5 g) proporcionarían una ingesta de fibra de 24,7 g – 39,1 g/día sin incremento calórico. (Nicklas et al., 2011; Jones, 2014)

Los alimentos enriquecidos en fibra ayudan a reducir el déficit de fibra y, a la vez, proporcionan un excelente sabor y beneficios adicionales para el metabolismo. Una dieta debería, generalmente, contener una mezcla de varios tipos de fibra.

Consumo de distintas fibras

Aunque la mayoría de tipos de fibra tienen más de un efecto beneficioso para la salud, ninguna de ellas cuenta con todos estos potenciales beneficios. Existen efectos comunes a una gran variedad de fibras diferentes, y otros que solo se asocian a determinadas fibras. Por ello, es importante consumir distintos tipos de fibra con el fin de maximizar los beneficios para la salud.

La fibra puede encontrarse en multitud de alimentos diferentes. La cantidad de fibra por ración puede encontrarse fácilmente consultando el Panel de Información Nutricional de dicha fibra alimentaria.

NutritionLabel (1)

Además, puede consultar el contenido en fibra de ciertos alimentos que no incluyen etiqueta nutricional, como las frutas y verduras, aquí.

Tolerancia gastrointestinal

Un aumento súbito de la ingesta de fibra, sobre todo en personas que llevan una dieta baja en fibra, puede tener efectos gastrointestinales, por ejemplo, incremento de las evacuaciones semanales, heces más blandas (sin llegar a la diarrea) o más flatulencias. Estos efectos naturales se deben o bien al efecto de volumen, o bien a la fermentación de la fibra en el tracto gastrointestinal. Los efectos potenciales pueden minimizarse aumentando la ingesta de fibra de forma gradual. Así, el tracto gastrointestinal podrá adaptarse mejor. Por este motivo puede resultar útil disminuir el consumo de fibra hasta que los síntomas remitan y, después, incrementar gradualmente la ingesta hasta llegar a la cantidad recomendada de 14 g/1000 kcal.


Fibra de raíz de achicoria, inulina, oligofructosa y fructooligosacáridos (FOS)

Fuente

La achicoria (Cichorium intibus L.) es una planta bienal de la familia de las Asteráceas. También se la conoce con los nombres de radicheta, escarola, margarita azul, diente de león azul, casia o caupí. La raíz contiene un hidrato de carbono conocido como inulina.1

Antecedentes

La inulina está presente en numerosas frutas y verduras. Los humanos la han consumido desde la antigüedad, y se cree que los habitantes del desierto norteamericano de Chihuahua consumían, hace 10 000 años, 135 g de inulina al día.2 La inulina es un carbohidrato complejo que almacena la energía de la planta de achicoria. La raíz desecada de la achicoria contiene aproximadamente un 17 por ciento de inulina.

Para aislar la inulina se recolectan las raíces, se lavan y se rebanan. La inulina se disuelve en agua caliente y se recoge para desecarla.1 La inulina de achicoria es un beta fructano lineal (2->1) compuesto por cadenas de unidades de fructosa (hasta 60 o más unidades) que pueden comenzar con una unidad de glucosa (GFn; G: glucosa, F: fructosa, n: número de unidades de fructosa). Las cadenas más cortas de inulina se conocen como oligofructosa o fructooligosacáridos (FOS). La fibra de raíz de achicoria no es digerible, ya que las enzimas humanas no hidrolizan las uniones entre moléculas.3 Una completa investigación realizada a lo largo de 20 años, y que incluye más de 150 estudios con intervención humana, evidencia las propiedades nutricionales y de salud de la fibra de raíz de achicoria.

Propiedades nutricionales

La fibra de raíz de achicoria es una fibra alimentaria que no se digiere ni se absorbe hasta llegar al intestino grueso. La microbiota del intestino grueso, especialmente bifidobacterias y lactobacilos, emplea la fibra de raíz de achicoria como nutriente. Los productos de descomposición de esta fermentación prebiótica sacarolítica son ácidos grasos de cadena corta y otros metabolitos.

Beneficios fisiológicos

  1. Mantenimiento de la microbiota intestinal: Modulación de la microbiota intestinal que fomenta el crecimiento de bifidobacteriaslactobacilos (conocidos prebióticos).
  2. Salud digestiva: mejora de la salud digestiva, proporcionando una regularidad normal (incremento de la frecuencia semanal de evacuaciones y mejora de la consistencia de las heces).
  3. Ayuda para el control de peso: Nos ayuda a comer menos de forma natural, lo que supone una ayuda para el control de peso ya que afecta a la sensación de hambre/saciedad, hormonas intestinales, ingesta de energía a largo plazo, pérdida de peso y composición de grasa corporal.
  4. Mantiene la salud de los huesos: Incrementa la absorción de calcio y la densidad mineral ósea.
  5. Ayuda al control del azúcar en sangre: Mejora los perfiles de azúcar en sangre e insulina.
  6. Ayuda al control de lípidos en sangre: Mejora los parámetros de lípidos en sangre, reduciendo el colesterol LDL y colesterol total y mejorando el colesterol HDL.

Beneficios

Modulación de la microbiota – conocido prebiótico: La fibra de raíz de achicoria es un conocido prebiótico que influye en el crecimiento de la microbiota de bifidobacterias y lactobacilos en el tracto gastrointestinal. El efecto prebiótico ha sido observado con una ingesta mínima de 5 g/día y en todos los rangos de edad, desde niños hasta ancianos, en 45 estudios con invervención humana.4,5

La investigación sobre los efectos de la fibra de raíz de achicoria en la microbiota gastrointestinal comenzó a mediados de los años 90. Se determinó que la fibra de raíz de achicoria (inulina, oligofructosa/FOS) era el nutriente preferido de algunos grupos de microbiota intestinal. Por ello, la inulina se considera un prebiótico, ya que la fibra es “un ingrediente selectivamente fermentado que da como resultado cambios específicos en la composición y/o actividad de la microbiota gastrointestinal, confiriendo con ello beneficios a la salud de la persona”4. También se han descrito efectos beneficiosos adicionales.5

Salud y regularidad digestivas: con un consumo de 8 a 12 gramos en varias ingestas a lo largo del día, la fibra de raíz de achicoria ayuda a la salud digestiva e influye en la regularidad. Según una revisión de las últimas evidencias científicas de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), la Comisión Europea (CE) aprobó una mención de efecto terapéutico relativa a la mejora de la regularidad y el incremento en la frecuencia de evacuación.7 Influye también en la consistencia de las heces, evitando heces duras y defecación dolorosa.8

Control de peso a largo plazo:  Según determinaron 19 estudios realizados en humanos para evaluar la saciedad e ingesta de energía y 16 estudios de control de peso corporal, la fibra de raíz de achicoria ayuda a reducir el consumo de comida.9,10

La inulina de raíz de achicoria puede usarse como fibra añadida, y también como sustituto bajo en calorías del azúcar o grasa en diferentes alimentos.  El valor calórico de la fibra de raíz de achicoria es de 1-1,5 kcal/g. Este valor es menor al de otros carbohidratos que proporcionan 4 kcal/g o grasas que proporcionan 9 kcal/g.

Salud ósea: la fibra de raíz de achicoria mejora la absorción de calcio incrementando la acidez en el intestino grueso, e incrementando también la superficie de absorción de calcio en el mismo. Se ha confirmado, además, que el calcio llega a los huesos y ayuda a la salud ósea. Se han publicado diez estudios con intervención humana realizados sobre la fibra de raíz de achicoria, incluido un amplio estudio del Departamento de Agricultura/Institutos Nacionales de la Salud (USDA/NIH) en el que 100 adolescentes consumieron 8 g de inulina enriquecida con oligofructosa al día.1

Control del azúcar en sangre: una evaluación de la EFSA en 2014 mostró que la sustitución del 20 por ciento de los azúcares por fibra de raíz de achicoria ayuda a alcanzar niveles de azúcar e insulina en sangre más bajos.12,13

La homeostasia de la glucosa, el peso corporal y la sensibilidad a la insulina mejoraban también en sujetos con prediabetes tras una ingesta de 30 g/día durante 6 semanas, independientemente de su estilo de vida y comparando al grupo con un grupo de control (celulosa).14,15

Mejora del estado metabólico en lípidos en sangre: En metaanálisis de pruebas de control aleatorias sobre individuos hiperlipémicos o sujetos obesos/con sobrepeso que consumían inulina se demostró una reducción de colesterol LDL y colesterol total, así como una reducción en los niveles de triglicéridos.16 Los prebióticos, incluidos inulina, oligofructosa o fructooligosacáridos, reducen los triglicéridos y aumentan el colesterol HDL en sujetos diabéticos.17

¿En qué tipos de alimentos suelen encontrarse la fibra de raíz de achicoria, inulina, oligofructosa y FOS?

La fibra de raíz de achicoria es una fibra soluble que, aparte de los ya mencionados beneficios para la salud, cuenta con una textura y propiedades sensoriales adicionales que la hacen adecuada no solo para el enriquecimiento en fibra, sino para sustituir al azúcar o las grasas en una gran variedad de productos. Ejemplo de ello son los alimentos horneados, cereales, productos lácteos y sus alternativas, repostería, bebidas, untables, sopas y salsas, aliños, helado, productos cárnicos y vegetales, aperitivos, granola, barritas nutricionales y alimentos infantiles o para fines especiales.18

 

Ingesta Diaria Recomendada

“De aquellos nutrientes insuficientemente consumidos el calcio, el potasio, la fibra alimentaria y la vitamina D se consideran nutrientes de interés para la salud pública, ya que las bajas ingestas están asociadas a problemas de salud”.Dietary Guidelines for American 2015-2020 (Directrices alimentarias para los americanos 2015-2020) (8ª edición).

En 2002, el Instituto de Medicina (conocido ahora como Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina) recomendó un consumo diario de fibra de 38 gramos para hombres de hasta 50 años y 25 gramos para mujeres de hasta 50 años. La ingesta diaria recomendada para hombres y mujeres de más de 50 años es de 30 y 21 gramos por día respectivamente, debido a la reducción del consumo de comida a partir de estas edades. Esta recomendación de ingesta diaria de fibra es de, aproximadamente, 14 g/1000 kcal. La mayoría de los americanos consume solo la mitad de la cantidad diaria recomendada (13,5 g y 18 g respectivamente). En muchos países tampoco se consume la suficiente fibra, tal como muestra este mapa interactivo con datos de 2010 obtenidos de Global Dietary Database. Esta escasez de nuestra dieta se conoce como déficit de fibra. El déficit de fibra es menor en algunos países, como México. Un informe de 2012 estima que la ingesta de fibra en México es de 27 gramos por día para los hombres y 22 gramos por día para las mujeres.

Según los hábitos alimenticios actuales, eliminar este déficit de fibra sin consumir alimentos enriquecidos en fibra aumentaría de forma significativa el consumo de calorías. Para alcanzar la ingesta de fibra recomendada sin tomar alimentos enriquecidos en fibra, la mayoría de las personas necesitaría aumentar su consumo en más de 500 calorías diarias. Pero, gracias a los alimentos enriquecidos en fibra, no es necesario sumar calorías a la dieta para alcanzar las necesidades nutricionales de fibra. Los estudios muestran que, por ejemplo, los cereales enriquecidos con fibra (2,5 g – 5 g) proporcionarían una ingesta de fibra de 24,7 g – 39,1 g/día sin incremento calórico. (Nicklas et al., 2011; Jones, 2014)

Los alimentos enriquecidos en fibra ayudan a reducir el déficit de fibra y, a la vez, proporcionan un excelente sabor y beneficios adicionales para el metabolismo. Una dieta debería, generalmente, contener una mezcla de varios tipos de fibra.

Consumo de distintas fibras

Aunque la mayoría de tipos de fibra tienen más de un efecto beneficioso para la salud, ninguna de ellas cuenta con todos estos potenciales beneficios. Existen efectos comunes a una gran variedad de fibras diferentes, y otros que solo se asocian a determinadas fibras. Por ello, es importante consumir distintos tipos de fibra con el fin de maximizar los beneficios para la salud.

La fibra puede encontrarse en multitud de alimentos diferentes. La cantidad de fibra por ración puede encontrarse fácilmente consultando el Panel de Información Nutricional de dicha fibra alimentaria.

NutritionLabel (1)

Además, puede consultar el contenido en fibra de ciertos alimentos que no incluyen etiqueta nutricional, como las frutas y verduras, aquí.

Tolerancia gastrointestinal

Un aumento súbito de la ingesta de fibra, sobre todo en personas que llevan una dieta baja en fibra, puede tener efectos gastrointestinales, por ejemplo, incremento de las evacuaciones semanales, heces más blandas (sin llegar a la diarrea) o más flatulencias. Estos efectos naturales se deben o bien al efecto de volumen, o bien a la fermentación de la fibra en el tracto gastrointestinal. Los efectos potenciales pueden minimizarse aumentando la ingesta de fibra de forma gradual. Así, el tracto gastrointestinal podrá adaptarse mejor. Por este motivo puede resultar útil disminuir el consumo de fibra hasta que los síntomas remitan y, después, incrementar gradualmente la ingesta hasta llegar a la cantidad recomendada de 14 g/1000 kcal.

 

Referencias

1    Moser, M., Agemans, A., Caers, W. (2014) Production and Bioactivity of Oligosaccharides from Chicory Roots. In: Dr.F.Javier Moreno, Dr.Maria Luz Sanz (Eds.), Food Oligosaccharides: Production, Analysis and Bioactivity, Wiley-Blackwell, pp. 55–75.

2    Leach, J.D. (2007) Prebiotics in ancient diets. Food Science & Technology Bulletin 4 (1), 1–8.

3    Moser, M., Sentko, A., Alexiou, H. (2015) Inulin and Health Benefits. In: Ramawat, K. G., Merillon, J. M. (Eds.), Polysaccharides: Bioactivity and biotechnology, pp. 675–715.

4    Gibson, G.R., Scott, K.P., Rastall, R., Tuohy, K.M., Hotchkiss, A., Dubert-Ferrandon, A., Gareau, M., Murphy, E.F., Saulnier, D., Loh, G., Macfarlane, S., Delzenne, N., Ringel, Y., Kozinawski, G., Dickmann, R., Lennoi-Wijnkoop, I., Walker, C., Buddington, R. (2010) Dietary prebiotics:current status and new definition. Food Science & Technology Bulletin 7, 1–19.

5    Roberfroid, M., Gibson, G.R., Hoyles, L., McCartney, A.L., Rastall, R., Rowland, I., Wolvers, D., Watzl, B., Szajewska, H., Stahl, B., Guarner, F., Respondek, F., Whelan, K., Coxam, V., Davicco, M.-J., Léotoing, L., Wittrant, Y., Delzenne, N.M., Cani, P.D., Neyrinck, A.M., Meheust, A. (2010) Prebiotic effects: metabolic and health benefits. Br J Nutr 104, S1-S63.

6    Gibson, G.R., Roberfroid, M. (1995) Dietary modulation of the human colonic microbiota: Introducing the concept of prebiotics. J Nutr, 1401–1412.

7    EU (2015) Commission Regulation (EU) 2015/2314 of 7 December 2015 authorising a health claim made on foods, other than those referring to the reduction of disease risk an to children’s development and health and amending Regulation (EU) No 432/2012. Official Journal of the European Union 12.12.2015.

8    Collado Yurrita, L., San Mauro Martin, I., Ciudad-Cabanas, M.J., Calle-Puron, M.E., Hernandez Cabria, M. (2014) Effectiveness of inulin intake on indicators of chronic constipation; a meta-analysis of controlled randomized clinical trials. Nutr Hosp 30 (2), 244–252.

9    Parnell, J.A., Reimer, R.A. (2009) Weight loss during oligofructose supplementation is associated with decreased ghrelin and increased peptide YY in overweight and obese adults. Am J Clin Nutr 89, 1751–1759.

10  McCann, M.T., Livingstone, M.B., Wallace, J.M.W., Gallagher, A.M., Welch, R.W. (2011) Oligofructose-enriched inulin supplementation decreases energy intake in overweight and obese men and women. Obesity reviews 12, 63–279.

11  Abrams, S.A., Griffin, I.J., Hawthorne, K.M. (2007) Young adolescents who respond to an inulin-type fructan substantially increase total absorbed calcium and daily calcium accretion to the skeleton. J Nutr 137, 2524S–2526.

12  Kellow, N.J., Coughlan, M.T., Reid, C.M. (2014) Metabolic benefits of dietary prebiotics in human subjects: a systematic review of randomised controlled trials. Br J Nutr 111, 1147–1161.

13  EFSA (2014) Scientific Opinion on the substantiation of health claims related to non-digestible carbohydrates and a reduction of post-prandial glycaemic responses pursuant to Article 13 (5) of Regulation (EC) No. 1924/2006. EFSA Journal 8 (10):1801, 1–3.

14  Guess, N.D., Dornhorst, A., Oliver, N., Frost, G.S. (2016) A Randomised Crossover Trial: The Effect of Inulin on Glucose Homeostasis in Subtypes of Prediabetes. Ann Nutr Metab 68, 26–34.

15  Guess, N.D., Dornhorst, A., Oliver, N., Bell, J.D., Thomas, E.L., Frost, G.S. (2015) A randomized controlled trial: the effect of inulin on weight management and ectopic fat in subjects with prediabetes. Nutrition & metabolism 12, 36.

16  Guo, Z., Liu, X.M., Zhang, Q.X., Tian, F.W., Zhang, H., Zhang, H.P., Chen, W. (2012) Effects of inulin on the plasma lipid profile of normolipidemic and hyperlipidemic subjects: a meta-analysis of randomized controlled trials. Clinical Lipidology 7, 215–222.

17  Beserra, B.T.S., Fernandes, R., do Rosario, Vinicius A, Mocellin, M.C., Kuntz, M.G.F., Trindade, E. (2015) A systematic review and meta-analysis of the prebiotics and synbiotics effects on glycaemia, insulin concentrations and lipid parameters in adult patients with overweight or obesity. Clinical nutrition (Edinburgh, Scotland) 34, 845–858.

18  Moser, M., Wouters, R. (2014) Nutritional and Technological Benefits of Inulin-Type Oligosaccharides. In: Dr.F.Javier Moreno, Dr.Maria Luz Sanz (Eds.), Food Oligosaccharides: Production, Analysis and Bioactivity, Wiley-Blackwell, pp. 457–469.